De Suráfrica y de México contaré algo más tarde. Primer partido de Francia, frente a Uruguay. Uruguay es un país que aprecio bastante. En mi imaginario es un país de melancolía, grandes escritores y fútbol. Horacio Quiroga, Mario Benedetti, Eduardo Galeano. Periodista y autor de Las venas abiertas de América Latina, Galeano cometió uno de los mejores libros sobre el balompié Fútbol a sol y sombra, se los recomiendo.
Mis recuerdos de fútbol empizan casi con un uruguayo, un fotógrafo uruguayo instaldo en Puerto Ordaz, la ciudad donde crecí, era el entrenador del primer equipo en el que jugué, Universitario de Guayana, un club azul, montado por exiliados peruanos.
Pero Uruguay es también el equipo que se llevó el último billete calificativo de Suramérica para el mundial, impidiendo asi a Venezuela de viajar a su primer mundial. Por lo tanto, no quiero a Uruguay. Venezuela era considerada la "cenicienta" de Suramérica, el equipo que no le ganaba a nadie. Pero el reancimiento del fútbol venezolano empezó cuando Richard Páez tomó la selección en mano y le inculcó un espíritu vencedor. Una fecha es considerada simbólica : el 14 de agosto del 2001. Ese día, en partido de las eliminatorias para el mundial 2002, la Vinotinto derrotó a la celeste 2-0. Cuentan que el orgullo de los urugayos estaba tan destrozado que un jugador vomitó al regresar al vestuario. Creo que fué Alvaro Recoba, entonces jugador del Inter. Más tarde, los venezolanos ganarían incluso en el Centenario, el antro de Montevideo (3-0, en mars 2004). Así que, cuando Uruguay pierde, me acuerdo de ese regalo de cumpleaños.
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